El sexo y las portadas de Comics en Chile hasta 1975

El sexo es un área que en Chile históricamente no se ha tratado mucho, y menos aún en el área del Comics que tenía una orientación casi exclusivamente infanto-juvenil (aquí hago excepción de las revistas picarescas que mezclaron desnudos femeninos con comics humorístico). Si consideramos un período que llega hasta casi el fin de la dictadura de Pinochet, solo en la ventana que se dio desde los fines de los años 60 y los años del gobierno de Allende se pudo ver una apertura, que además se reflejó en una intención de hacer una historieta orientada a un público más adulto.  Haremos hoy una somera revisión a algunas portadas mostrando el devenir al respecto.

    

A mediados de los años 60, con la editorial Zig-Zag en su momento de mayor desarrollo en este ámbito, los múltiples dibujantes del equipo, se encargan de realizar algunas portadas y publicidad para las historietas extranjeras.  Es así que podemos ver el trabajo de Igor reflejando una tibia sensualidad para trabajos sobre el personaje James Bond. Antes solo misteriosos atisbos, como por ejemplo el caso la portada del Capitán Júpiter.  Ambos trabajos del año 1968.  También en el mismo área de espionaje, un trabajo para el personaje Johnny Nero, en la colección de bolsillo “Super Fantástica”.

   

Concluida la cruzada moralista de los años 1968/1969, y que fuera dirigida por la “Federación de Apoderados de Colegios Particulares”, se pudo comenzar a ver en los kioscos trabajos más osados.  Por ejemplo con el trabajo de Esteban Maroto como parte de la revista 5 x Infinito.  También ese mismo año (1970), el editor y dibujante Guido Vallejos, saca a la luz pública la versión local de Vampirella.  Ciertamente es este el personaje más sexy que hayan visto los ojos de aficionados hasta los años 80 en los kioscos.

Ya en el año 1972, y bajo el sello Quimantú, los portadistas obtienen una gran libertad que, por ejemplo, se traduce en un gran número de portadas realizadas por un todavía no identificado dibujante para la revista de CF Dimensión Cero (y cuya firma adjuntamos), que son profundamente sexies.  Es un conjunto de siete portadas, desde la edición 48 y hasta la última, la 57.

En otras revistas también se exhibe el desnudo femenino sin mayores inconvenientes, como por ejemplo en esta portada de la revista Jungla.  Dentro de las pocas revistas que se mantuvieron por poco tiempo luego del golpe de estado,  y gracias al apoyo del escritor y miembro de la fuerza área Diego Barros Ortiz, -quien fuera designado para dirigir la Editorial Gabriela Mistral (sucesora de Quimantú)-, estuvo justamente Jungla, de la cual tenemos una excelente muestra de su trabajo en manos del maestro Igor.  Un par de años después, la Ed. Gabriela Mistral fue vendida, y los comics dirigidos a un público algo más adulto, se hundieron por muchos años.