miércoles, 24 de octubre de 2012

Dos ilustradores chilenos poco conocidos: Hedi Krasa y Garcia Moreno

En la revisión del trabajo gráfico artístico en Chile, de repente nos hemos encontrado con casos que nos han llamado la atención por su estilo y por su escasa y puntual producción.  Hoy revisaremos justamente a dos artistas que caen en esa categoría.



La primera es una mujer. Hedi Krasa a quién como ilustradora la hemos  encontrado en algunos ejemplares de la colección de literatura infantil Rapa Nui. Sabemos que nació en Viena en 1923, y falleció en Santiago en 1989.  Huyendo de la persecución nazi llegó a Chile en 1938, en donde trabajo con el destacado coreógrafo de origen alemán Ernst Uthoff, al parecer primero como bailarina.  Si tenemos certeza de que muy pronto su trabajo se enfocó muy fuertemente a las partes de diseño de vestuarios y decorado en muchas y destacadas producciones de ballet y opera en Chile en los años 40’s.   Por ejemplo es citada en este aspecto en el texto “Historia del Ballet en Chile” de Yolanda Montecinos de Aguirre.  Años más tarde habría retornado a Europa donde se dice que trabajó como como escenógrafa y pintora  de retratos. Volvió en 1986 a Chile.



En la colección de literatura de la Editorial Rapa Nui, gran esfuerzo del escritor Hernán del Solar, podemos hallar una interesante cantidad de trabajos por dibujantes que no resultan habituales. Así, y dentro de los límites de nuestro acceso al trabajo de esta editorial, conocemos al menos tres portadas de libros y en un caso las ilustraciones interiores de Krasa.  

Destacamos su diseño en la primera obra de la muy conocida dramaturga chilena Isidora Aguirre (La Pérgola de las Flores, por ejemplo es de su autoría). Esta obra se titula "Wai-Kii" y salió destacada en un concurso de la editorial, mismo en que la obra ganadora fue Papelucho de Marcela Paz, que iniciaría de este modo su largo camino que lo transformaría en un clásico de la literatura infantil chilena.

   


Los dibujos de Krasa demuestran claramente su calidad y su gran despliegue en los trajes, y con una orientación escenográfica en sus ilustraciones.  En resumen un trabajo que merece recuperarse.


El segundo caso es del dibujante chileno Sergio García Moreno, quién firmaba García Moreno o GM en ocasiones. Este artista es originario de la ciudad de La Unión, al sur del país, en donde habría publicado sus primeros trabajos en un diario local.  Al parecer luego se integra al equipo de dibujantes de la editorial Zig-Zag, probablemente a mediados o inicios de los años 50’s. 


    

Podemos hallar portadas e ilustraciones suyas en varios libros publicados por la editorial en esos años, especialmente en la colección de literatura juvenil conocida como la “Colección Amarilla”, que incluía un gran número de ilustraciones interiores.





De su vida sabemos que residió gran parte de su vida en USA y Guatemala, por lo que presumimos que se marchó del país a comienzos de los años 60’s.  Su primer destino fue USA, en donde llegó con su portafolio




En un sitio de una librería de comics de Guatemala que realizó un homenaje a García Morenos, se menciona que también habría publicado una historieta en Chile: Ken Barows, el Aventurero, dato que no hemos podido comprobar.

En USA llegó a trabajar en la productora Filmation, durante casi 20 años. La productora fue responsable de una gran cantidad de series dibujadas que se distribuyeron a todo el mundo. Entre ellos se mencionan a Skeletor, She-Ra, Orco, He-Man y los demás amos del universo. Se dice:  “Parte de la biblioteca artística que tiene en casa Dora Elizabeth encontramos plantillas originales de la época que trabajó en Filmation, bosquejos de He-Man con su fiel espada de Greyskull, viñetas con una amplia gama de personajes que dibujó entonces.”


    
Desde USA se fue a Guatemala, lugar en donde residió hasta su fallecimiento. Allí su trabajo se orientó especialmente a dibujos educativos, y demás elementos didácticos para uso del campesinado y en la de educación básica rural.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Literatura fantástica chilena en formato pequeño


 Pequeños formatos, grandes contenidos. El formato muy pequeño, algo menor que  el conocido como “de bolsillo” tanto en tamaño como en número de hojas, es un formato muy poco habitual en la industria editorial chilena.  Probablemente ello tiene su origen en la dificultad de hacer del libro un producto que muchas personas quieran leer, y sacarlos del elitismo en que habitualmente se desenvuelve.

En el ámbito de la fantasía y la ciencia-ficción conocemos tres casos en Chile.  De distinta época, con distinto énfasis y buscando distintos fines. Por aparición cronológica ellas son:

-- La colección El Viento en la Llama, realizada por el escritor de origen argentino Armando Menedin (primeros años de los 60’s).
-- La colección Minilibros Quimantú, a cargo de la editorial homónima durante el período que va de 1972 a 1973
-- La colección Lectura de verano, que el desaparecido periódico La Nación obsequió a sus lectores durante los meses de Enero y Febrero de 1986. 

      


El Viento en la Llama
Señaló Menedin: “Las dificultades que tienen los autores para editar crecen día a día. Digo esto, no con el ánimo de tratar el problema en el breve espacio que da esta solapa, sino señalar un estado crónico de cosas que afectan al escritor. 

Las editoriales, que siempre siguen un plan de conveniencias económicas, manifiestan invariablemente que ediciones de corto tiraje no permiten ganancias sino que dan trastornos. Es posible que tengan razón. Pero estas razones no son valederas para un crecido número de autores que, ante el alto costo de impresión, deben renunciar a publicar.  Desde la solapa de la segunda edición de “Tratado del bosque”  de Juvencio Valle,  1/Oct/1962.

En las hoy escasas ediciones de El Viento en la Llama encontramos en el ámbito de la ciencia ficción dos cuentos, y un poema, mientras otros títulos incluyen en sus tres series a tan notables autores como Neruda, Rosamel del Valle, Juvencio Valle, Ángel Cruchaga Santa María, y José Miguel Vicuña.

--Laura” de Armando Menedín
-- Juana . . . y la cibernética” de Elena Aldunate
--Poemas para una casa en el Cosmos” de Hernan Lavin    

   
 


Minilibros Quimantú

La colección Minilibros fue una de las más exitosas de las desarrolladas por la Editorial Nacional Quimantú, con tirajes de 30.000 y 50.000 ejemplares por título. Aparecían los días martes de cada semana a lo largo del territorio nacional. Sus volúmenes correspondían a las más variados géneros, obras y autores  de la literatura nacional e internacional. Sin distinción de temas, los minilibros Quimantú pusieron al alcance de todos los ciudadanos novelas de amor, aventuras, misterio, drama, policiales y suspenso.

El primer volumen fue El chiflón del diablo, de Baldomero Lillo, fechado en agosto de 1972, al que le siguieron obras de destacados escritores como Conan Doyle, Horacio Quiroga, Fernando Santiván, Máximo Gorki, Fedor Dostoyevsky, Emilio Salgari, Armando Cassigoli, Edgar Allan Poe por citar algunos.
El número 56 de esta colección, El escarabajo de David H. Lawrence, destinado a salir en septiembre de 1973, quedó en proceso de impresión y, en 1974, la nueva Editora Nacional Gabriela Mistral lo editó como uno de sus primeros volúmenes.
   


En Ciencia Ficción, Fantasía y Terror publicaron los siguientes volúmenes, uno de los cuales lo recuerdo perfectamente, porque lo leí en su minuto en mi sureña ciudad natal (Temuco)  y jamás lo he olvidado. Los textos publicados fueron:

30 días tenía septiembre”, antología conteniendo
    - Robert F. Young • Treinta Días Tenía Septiembre • Thirthy Days Had September
    - Ray Bradbury • El Ruido del Trueno • A Sound of Thunder
    - Isaac Asimov • Multivac • All the Troubles of the World
    - Ray Bradbury • La Sirena • The Fog Horn
    - Robert Abernathy • El Año 2000 • The Year 2000
    -  Algis Budrys • El Distante Rugir de los Motores • The Distant Sound of Engines

El país de los ciegos”  de H.G. Wells, conteniendo
    - El país de los ciegos
    - La puerta en el muro

Historias de vampiros”, antología
     - Clemente Palma, Vampiras
     - Thomas Narcejac. Vampiro con manguillas
     - John Haigh. Confesión antes de ser ahorcado
  
La Garra del mono”, antología
     - W. W. Jacobs , La Garra del Mono
     - H. P. Lovecraft , En la cripta
     - Wilkie Collins, Una cama sumamente rara
     - Edgar Allan Poe, El Barril del Amontilado
     - Edgar Allan Poe, El Corazón delator

La ruina de la casa Usher”  de Edgar Allan Poe


La Nación Lectura Verano 1986
La colección Lectura de Verano 1986 constó de volúmenes de 64 páginas, papel de baja calidad, presentación standard y –en general- buena calidad de los textos.    No se incluyó presentación, introducción ni nada parecido.  Se publicaban y entregaban junto con el desaparecido periódico  La Nación los fines de semana durante los meses de Enero y Febrero de 1986.  Incluyó un error en el nombre del autor en el segundo volumen: Ursula Le Gun.  Listado completo en el sitio www.tercerafundacion.com



En paralelo publicó una serie policial con obras de Ellery Quinn, Agatha Christie, George Simenon, Jean Ray.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Revista de Comics, Sexo y Reinas Africanas


Fiction House fue una editorial norteamericana que comenzó con la publicación de Pulps en los años 20’s derivando luego hacia los Comics a fines de los años 30’s.  Muchos de sus títulos son hoy muy buscados por los coleccionistas de la llamada “Golden Age” del comic, específicamente por las heroínas que protagonizaban un gran número de sus aventuras.


En Ciencia-Ficción su principal título fue Planet Comics, mientras que en aventuras de la selva tenía a Sheena, y a las series de aventuras en Fight.  Estos son de los más conocidos hoy día, y curiosamente, de dos ellos se surtió de material la pionera revista Cascabel en Chile.
   

Cascabel fue una producción de la editorial Lord Cochrane, parte del grupo El Mercurio. Editó del orden de 25 ejemplares en el año 1957.  Según lo que hemos averiguado no incorporó producción de autores locales, con la única excepción de las portadas a cargo de Abel Romero.

   

Su tamaño fue en el usual en el tipo de revista comic-book, el papel de mala calidad, y casi todo el contenido era en blanco y negro, exceptuando la portada y la pagina central.  Cerca del número 15, se mejoró la portada cambiándola a un papel de mejor calidad que permitió una reproducción del color más óptima.  Incluyó obras de todos los tipos de géneros con el formato folletín, o continuado entre varios ejemplares. Entre las historias hay varias que ya eran clásicos al ser publicados anteriormente en suplementos de diarios, como el caso del boxeador Ben Bolt.  Incluyó además cuentos seriados con dos a tres páginas por número.

    


Y también había historias de ciencia-ficción. Hemos reconocido dos a la fecha.  Una corresponde al detective espacial Rick Randon al cual ya le dedicamos una entrada en este Blog.  Y el segundo es Auro, el rey de Júpiter que fue publicado justamente en las páginas de la revista de la Fiction House Planet Comics.

Pero una historia que fue destacada muchos números, y que mereciera la portada del ejemplar 1, y las páginas centrales en todos los ejemplares en que publicó, fue Rani, la de los Tigres.  Esta Rani no es otra que Tiger Girl, una serie publicada en varios ejemplares del comic-book de la Fiction House Fight.  Es una mezcla entre una reina africana, pero que tenía origen monárquico en India  (de hecho se dice que es princesa e hija de Rajah Vishnú) y aventuras algo mezcladas de ambos continentes. En su original las historias tenían entre seis y diez páginas cada una, las que fueron publicadas en Cascabel con solo dos páginas centrales, haciendo que las historias se continuaran entre tres y cinco ejemplares.

         


Al merecer la pagina central, la obra fue mostrada a colores, y curiosamente Rani muestra inicialmente color de pelo pelirrojo, luego rubio, y finalmente trigueño.  Las magias de los coloristas pienso yo, aunque algo de la confusión viene de la edición original según hemos averiguado.

Respecto a la publicación original, una estudiosa menciona los siguiente: “…la mayoría de las historias de la editorial Fiction House eran protagonizadas o incluían a heroínas fuertes, bellas, y competentes.  Ellas eran enfermeras, aviadoras, mujeres detectives, espías, y reinas de selva vestidas con pieles, y todas estaban al mando. No necesitaban ser rescatadas.” 

         


Mientras un segundo agrega: “Cada página de cada historia incluía al menos una larga imagen de una atractiva mujer, con vestimenta exigua, y particularmente exhibiendo largas y estilizadas piernas.”.



   

Según hemos revisado, la historieta fue exhibida en Cascabel sin modificaciones, solo algunos cambios menores en márgenes y agregando números a los cuadros. Ciertamente resulta curioso encontrar esta historia en el conservador Chile de 1957. Una muestra que la historia tiene más matices que lo que parecen indicar los grandes historiadores.

domingo, 7 de octubre de 2012

De Zig-Zag a Quimantú – Historietas en Evolución (I)


Las revistas de historietas de en el formato clásico norteamericano de 32 páginas y tamaño estándar, se industrializó en Chile a contar de 1963-1964 aproximadamente, cuando la editorial Zig-Zag comenzó a publicar ediciones locales de las producciones de Disney.  Anteriormente el formato, conocido internacionalmente como “Comic-Book”, ya se había hecho presente en Chile a través de las revistas publicadas en México desde fines de los 50’s que se inspiraban en el formato directo de sus vecinos del norte (SEA, Novaro, etc) y que llegaban importadas a los kioscos locales.

Posteriormente Zig-Zag creó un departamento de adaptación y creación con artistas chilenos, y allí comenzó la historia de la creación de un gran número de obras que hoy son buscadas y leídas por muchos.


La historia de Zig-Zag sufrió un violento vuelco en 1971 en el gobierno de Allende procede a realizarse una nacionalización de los talleres, siendo asumidos por el estado, y de igual forma con la gran mayoría de los títulos que eran de producción local.  Zig-Zag se quedó fundamentalmente con la línea Disney, mientras los otros títulos eran revisados y validados por los nuevos responsables del área de historieta. En la nueva editorial Quimantú, unas pocas revistas fueron simplemente eliminadas, caso de James Bond 007, mientras la mayoría entró en un proceso de revisión de contenido y de ideología.


Y allí comenzó un proceso de transformación que determinó un cambio en logos y contenido.
Pero esto tampoco terminó aquí.  Luego del golpe militar de 1973, la editorial Quimantú desapareció como tal, y las nuevas autoridades revisaron cada uno de los títulos para decidir si podían o no continuar.   Unos pocos títulos se mantuvieron por un par de años más, pero nuevamente un proceso de revisión ideológico se hizo sobre cada título bajo el nuevo sello Gabriela Mistral.


Hoy haremos solo una revisión de la evolución de los Logos que identificaron a las revistas en su evolución de una etapa a la otra.




Titulo:  Jungla  -  Paso de Zig-Zag  a Quimantú (donde durante un tiempo se dio preeminencia a la nueva historieta “Hombres de la Jungla), volviendo a ser simplemente Jungla con Gabriela Mistral hasta su extinción.

  






Título:  Intocable – Pasó de Zig-Zag a Quimantú, en donde se le transformó a El Guerrillero con aventuras de Manuel Rodriguez en la independencia.  Con Gabriela Mistral se decidió comenzar nuevamente con ella, con numeración desde uno.




Título:  El Jinete Fantasma – Pasó de Zig-Zag a Quimantú en donde se transformó en El Manque, personaje del campo chileno del momento.  Luego se transformó con Gabriela Mistral en otro Manque, un personaje más elegante y con aventuras menos comprometidas socialmente.